Ana María nació en Alejandro Ledesma, Marcos Juárez, provincia de Córdoba, el 06 de febrero 1948. Hija del odontólogo Enrique Steifkens y de la profesora Alicia de Anquín.

Cursó el secundario en el Instituto de Enseñanza Privada “Santa Rosa” de Venado Tuerto, Provincia de Santa Fe y egresó con el título de maestra normal en 1964. 

En 1964 ingreso a Medicina y cursó aproximadamente hasta 1965 inclusive. Dos años más tarde, en 1967, ingresó a Psicología (ACH-FFyH), en la Facultad de Filosofía y Humanidades de la misma Universidad.

Trabajaba en el Departamento de Complementación Educativa de la Provincia de Córdoba, (relacionado con tareas sociales) y ejercía la docencia en un centro dependiente del Ministerio de Educación, donde tenía militancia gremial.

El 24 de mayo de 1974 se casó con su compañero Héctor, también militante de Montoneros, con quien tuvieron un hijo: Carlos Martin, y fueron a vivir a Buenos Aires. 

«La Negra», como le decían sus compañeros, primero fue militante del Frente de Izquierda de los Trabajadores (FIT) y luego de Montoneros, en donde era una de las encargadas del área de Finanzas. 

Fue secuestrada en la vía publica entre el 11 y 12 de enero de 1977, mientras iba de Morón a Ramos Mejía, provincia de Buenos Aires, junto a su hijo de dos años, quien luego fue entregado a la familia de Ana María. Permaneció cautiva en el Centro Clandestino de Detención, Tortura y Exterminio «Escuela de Mecánica de la Armada (ESMA)». Dos días antes su domicilio fue allanado y completamente destruido por personal de la aeronáutica, según relatos de vecinos trasladaron sus bienes en camiones militares. 

Este caso fue incluido en la causa judicial “Esma unificada” en la que se investigaron, probaron y condenaron delitos de lesa humanidad. Los responsables de su crimen fueron juzgados. La sentencia fue dictada en noviembre de 2017.  

En el año 2017 en el marco de las Jornadas Nacionales de Derechos Humanos «decir lo indecible» organizadas por el Colegio de Psicólogos, el Archivo Provincial de la Memoria junto con el Colegio de Psicólogos, el Seminario de Memoria y Comunidad de la Facultad de Psicología, familiares y allegados presentaron un álbum colectivo de estudiantes, docentes y graduados desaparecidos y asesinados de esa Facultad, donde se encuentra la vida de Ana María.

Tenía 30 años. Continúa desaparecida.